Introducción

Éste es un curso en el que se pretende enseñar a los alumnos a realizar el análisis y la crítica filosófica de un conjunto de textos representativos de la cultura filosófica del Renacimiento, con el fin de poder desentrañar las complejas relaciones entre la emergencia de diversas formas de escritura filosófica que hoy resultan características de los periodos conocidos como Humanismo y Renacimiento, debido a sus peculiaridades, con la emergencia de específicas prácticas filosóficas vinculadas estrechamente con el surgimiento de las ciudades renacentistas y el cuidado que se le dio al desarrollo filosófico de la vida civil en estas circunstancias. Los aprendizajes que se podrán realizar en este curso les permitirán a los estudiantes construir lecturas filosóficas de los textos selectos basados en una contextualización histórico-cultural que pondrá en perspectiva la singularidad de las prácticas filosóficas que se desarrollaron durante el Humanismo y el Renacimiento, así como las diferencias con las prácticas filosóficas de otros periodos en la historia de la filosofía, principalmente en lo que se refiere a las desarrolladas durante la Edad Media y la Antigüedad, espacialmente en la Antigüedad tardía, pero también respecto a las formas más características de la filosofía moderna, permitiéndoles integrar los aprendizajes de los cursos de textos filosóficos de los semestres anteriores, así como los cursos de Historia de la Filosofía, y les brindará una preparación que facilitará un mejor aprovechamiento académico de los cursos que deberán acreditar en los semestres posteriores. Se espera que este curso pueda colaborar con el fortalecimiento de las materias del área de Propedéutica y Método, pero también a las del área de Historia de la Filosofía, lo mismo que a las correspondientes a las demás áreas disciplinares, ya que la metodología de análisis y comentario de los textos filosóficos seleccionados para la impartición de este curso implica el reconocimiento y el estudio detallado de formas de argumentar y construir herramientas conceptuales y metodológicas estrechamente vinculadas a los intereses de la metafísica, la ética, la teoría del conocimiento, la filosofía de la ciencia y del lenguaje, así como a la filosofía política, la estética, la filosofía del arte y la ontología; sin olvidar, por supuesto, a la filosofía de la historia.